Ciencia y Caza

Nos encontramos cada día con desagradables noticias en los medios de comunicación relacionadas con los problemas de muchas familias para llegar a fin de mes, a punto de ser desahuciadas de sus casas o que tienen problemas incluso para alimentarse.

Son, por desgracia, situaciones cada vez más habituales en esta sociedad nuestra, tan insolidaria a veces y marcada por la corrupción de muchos que, auspiciados en la impunidad de cargos de relevancia, han generado una inestabilidad tal que, de uno u otro modo, nos afecta y afectará durante unos cuantos años.

Sin embargo, no sólo se pueden leer este tipo de noticias, también estas situaciones parecen incrementar el número de otras en las que la solidaridad, el calor de lo humano y la generosidad de los que se encuentran en mejor posición ayudan, comparten o apoyan a los que lo están pasando mal.

En el ámbito que nos ocupa, la actividad cinegética, tampoco somos ajenos a esta corriente solidaria y en los últimos tiempos, con relativa frecuencia, tenemos la suerte de poder difundir noticias que nos llenan de orgullo y hacen que, si cabe, el valor de la caza y de los cazadores crezca un poco más y se afiance en la sociedad que nos toca vivir.

Entre los ejemplos de estas acciones podemos encontrar en los últimos días la montería solidaria que la familia Cortés-Toledano, propietaria de la finca El Acebuchar, está organizando para recaudar fondos para los más necesitados a los que ayudan las Hermanas de la Compañía de la Cruz de Puertollano (Ciudad Real) o, por supuesto, el Proyecto Solidario Carne de Caza puesto en marcha hace ya varios meses por ASICCAZA, Asociación Interprofesional de la Carne de Caza, que entrega periódicamente lotes de carne de especies cinegéticas a asociaciones como Cáritas, Cruz Roja o directamente a comedores sociales para que pueda llegar, de forma directa, a los más necesitados.

Desde Ciencia y Caza queremos hacer con este artículo un pequeño homenaje a todos aquellos que hacen posible que algunas familias lo pasen un poco mejor y deseamos que cada vez sean más los proyectos cinegéticos solidarios que además de ayudar a aquellos que los necesitan, dejan en tan buen lugar a este nuestro sector.