La cetrería es un arte de caza que, desde el 16 de noviembre de 2010, está declarado como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Destaca por el empleo de azores, halcones y otras especies de aves rapaces para la caza de conejos, liebres, perdices, córvidos, e incluso, algunas piezas de caza mayor.
Existen dos modalidades de caza, la altanería y el bajo vuelo. La primera se caracteriza por el empleo de halcones que planean pacientes a gran altura sobre el territorio hasta encontrar una pieza sobre la que hacer un “picado” para intentar cazarla. La segunda se basa en el uso de azores, águilas de Harris… que van en el puño del cetrero hasta que éste levanta la pieza y es entonces cuando comienza la persecución.
Se encuentran referencias de la práctica de esta modalidad de caza siglos antes de Cristo, con diferente seguimiento en su empleo a lo largo de la historia en diferentes civilizaciones. Su origen probable se atribuye a China, mientras que a Europa parece llegar con los pueblos Godos invasores de estos territorios. En España se inició de la mano de pueblos Germánicos venidos del norte.
El máximo esplendor lo alcanzó en Europa en la Edad Media, siendo práctica habitual de caza de nobles y reyes, si bien, con la llegada de las armas de fuego comenzó a perder protagonismo.
En la actualidad son numerosos los cazadores que crían con pasión aves rapaces para la práctica cinegética y, por su belleza, contacto con la naturaleza, lucha de igual a igual entre especies, genera una verdadera atracción entre aquellos que tienen la suerte de poder compartir un día de caza con un cetrero.
Hoy 16 de noviembre los cetreros celebran su día mundial, ¡Felicidades!
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